Pero déjenme retroceder unos meses atrás para poder explicar mejor lo que fue toda esta experiencia. A principios de año recordé que este año se cumplían diez años del último concierto de Soda Stereo y pensé que dado a que todos tenían una carrera fructífera estaba díficil que se reunieran. No contaba con que les hicieran una oferta que no pudieran rechazar.
Y así llegó Junio y entre rumores y negaciones surgió la noticia. Soda se reunía para una gira más y luego regresar cada quién a sus respectivas carreras, no sólo eso....pasarían por Caracas!!!!!. Demasiado para una sola persona. Sin embargo pasarían los días y las semanas y los meses sin noticias al respecto de la fecha en Venezuela.
Me estaba preocupando, creía que simplemente no había plata para traerlos, pero finalmente anunciaron la fecha, el 02/12. Excelente!!! hasta que pusieron el referendo para es día y obviamente estando prohibidas las reuniones durante las elecciones pues de nuevo era el suspenso.
Finalmente anunciaron la nueva fecha y la venta de las entradas. Para mi desconsuelo justo ese fin de semana estaba en Maracay pero pude comprarlas ese domingo, hice mi colita con impaciencia y no estuve tranquilo hasta que no me dieron la entrada.
Después de mucho esperar llegó el día esperado. Jueves 29/12, en medio de protestas y demás cosas de nuestro quehacer político diario. Llegamos al estacionamiento en medio de rumores de que no ibamos a poder dejar el carro, autobuses, vans y carros particulares poblaban el sector de la Rinconada y el Poliedro. Pero finalmente entramos y dejamos el carro sin problema alguno.
Hicimos la mamá de las colas para entrar, parecía que estaban regalando cosas adentro del hipódromo. Una vez que estábamos en el área del concierto fue un poco caótico usar los baños pues había mucha gente.
Entre empujones llegamos lo más cerca que pudimos de la tarima. Se acercaba la hora, era inminente el concierto. Sin embargo tuvimos que esperar como una hora mientras unos tipos arreglaban unas luces que al parecer no estaban funcionando.
Entonces sucedió, a las 9:05 pm según mi reloj. Se apagaron las luces y al ritmo de la canción que Soda hizo para el tributo a Queen y un video de la carrera de la banda aparecieron. Ahí estaban, a una distancia risible, aunque me tenía que parar en puntillas para verlos. Comenzaron con "Juegos de Seducción", esperaba demasiado la parte en que hay que hacer "EH, EH, EH" y fue todo lo que esperaba y más.
Y así empezó el mejor concierto al que he asistido. Un espectáculo de luces increíble. Pantallas que mostraban a cada uno por separado. La energía de la banda fue genial aunque se notaba que todavía diez años después algunos roces continúan.
Momentos favoritos cuando tocaron En la ciudad de la furia y Persiana Americana. Como dicen los sureños deliré con esas canciones. Pero todo estuvo genial. A cada rato algo pasaba con las luces y el escenario que me impresionaba.
Cerati fue el único que nos habló pero Zeta fue el que más gozó el concierto, no paró de sonreir en toda la noche. Charly le dio duro a su batería pero se habrá reído dos veces en tres horas.
Cuando el concierto terminó luego de casi de tres horas de música continua tenía la satisfacción de haber visto un espectáculo como nunca había visto en mi vida y que valió la pena la espera para verlos volver.
Fotos del concierto tomadas por mi: http://picasaweb.google.es/luis1210/MeVerSVolverCaracas
